En cada rincón de Dabajuro está la huella de Carmen Gómez
“Yo conozco a todo el mundo y el todo el mundo a mi”
Lourdes Díaz cpn 18234
No hay evento o lugar en Dabajuro; sea casa, calle, negocio, plaza, velorio, matrimonio o espacio al que no haya ido Carmen María Gómez. A sus 74 años es la primera vez que permite que le pregunten por su vida o que le tomen fotos. Se trata de uno de los personajes populares más emblemáticos de Dabajuro.
Tras sufrir un ACV hace 12 años, su forma de vida cambió en detalles radicales. La larga cabellera blanca que le caracterizaba desapareció y su lenguaje era nulo. Poco a poco se fue recuperando y ahora, por órdenes médicas –dice- camina unos 10 kilómetros diarios recorriendo todo el pueblo en busca de ayuda para sus medicinas. Tiene un carácter fuerte. Le cuesta mucho pronunciar palabras por lo que recurre a escribirlas para ayudar a discernir lo que desea expresar. Cuenta que nació el 16 de julio de 1936 en Dabajuro. Hija de María del Rosario Gómez y Teófilo Rafael Reyes, ha procreado 6 hijos, tiene 36 nietos, bisnietos y cientos de compadres . Dice “tengo mi casa en Las Camelias, trabajé ayudando a familias como la de “El Canario” y Doña Aracelis, me casé 3 veces, no me canso de caminar. Me gustan las carteras, los colares, los zarcillos, la pintura de uñas roja, pintarme la boca y usar talco para que me vean bien. Cumplo con todo el mundo, porque todo el mundo me conoce a mí y yo conozco a todo el mundo”.
Al preguntarle sobre Dabajuro, su historia y lo que desearía decirle al pueblo, expresa: “Dabajuro es el lugar más bonito del mundo, ha crecido muy grande y me gusta todo. Yo soy Cristiana por eso voy a todas las iglesias, no importa si son católicas o evangélicas. No peleo de verdad, más bien me gusta echar broma, pero sufro cuando me faltan el respeto. Mi consejo para la gente es que no fumen, no tomen aguardiente, no corran en los carros, que trabajen y que caminen para que estén sanos”.
En Dabajuro, propios y extraños suelen bromear sobre las anécdotas que han vivido con Carmen Gómez. En esta oportunidad contrasta su actuación con la mujer verdadera que cuenta quién es con sinceridad, arraigo y pertenencia al pueblo que la vio nacer, crecer y vivir en cada uno de sus rincones.
